Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 29 marzo 2024.

‘No se puede seguir sin una reforma fiscal en profundidad’

    CCOO cree que reducir el déficit público, impulsar el crecimiento económico y sostener el modelo social no es compatible con los objetivos del Plan de Estabilidad acordado con la UE. Hace falta una reforma fiscal que garantice la suficiencia de los ingresos para garantizar las políticas públicas

    25/08/2017.

    CCOO ha hecho público un comunicado en el que considera imprescindible abordar una reforma fiscal en profundidad si de verdad queremos evitar un aumento de la deuda pública situada ya en el borde el 100% del PIB. “Una deuda pública ahora y por el momento manejable, en un contexto de tipos de interés bajos y que aun así consume más recursos que los que se destinan a la protección por desempleo, pero que puede dejar de serlo a poco que se incrementen estos, si tenemos en cuenta que con los actuales niveles de deuda cada punto de intereses supone unos 10.000 millones de euros”, advierte CCOO.

    En opinión de CCOO, para recuperar progresivamente los niveles de gasto público previos a la crisis necesitamos un sistema tributario que también homologue la presión fiscal con Europa y que ponga los medios necesarios para la persecución del fraude fiscal. “Apostamos por un sistema tributario justo en el reparto de las cargas, con impuestos sencillos, donde se eliminen reducciones y deducciones, aproximando los tipos efectivos a los nominales. Una fiscalidad donde aumente la aportación de las rentas del capital, que las grandes empresas tributen en relación con sus beneficios reales y un IVA reducido para todos los consumos y suministros básicos en un hogar”.

    En definitiva, concluye el comunicado de CCOO, una reforma fiscal que garantice la suficiencia de los ingresos para sostener el crecimiento, recuperar el modelo social de los efectos de las políticas de recortes, construido a modo de reparto equitativo de la carga fiscal y equiparando la fiscalidad de las rentas del capital con las del trabajo. “España no tiene un problema de exceso de gasto, nuestro problema está situado en el terreno de los ingresos. Unos ingresos en términos de PIB sensiblemente menores a los de la media de los países de la eurozona. Son estos menores ingresos fiscales los que hacen que nuestro gasto social sea considerablemente menor que el de estos mismos países y que la inversión pública se haya desplomado en España en estos años.