Confederación Sindical de Comisiones Obreras | 24 noviembre 2024.

Resolución de la Comisión Ejecutiva Confederal de CCOO sobre la situación política

    La Comisión Ejecutiva Confederal de CCOO se ha reunido en el día de hoy, con carácter extraordinario, para valorar la situación política generada por el fracaso de la sesión de investidura de un nuevo Gobierno y ha acordado hacer pública la siguiente resolución:

    26/07/2019.
    La imposibilidad de contar con un Gobierno con un programa de izquierdas es merecedora del reproche de la ciudadanía

    La imposibilidad de contar con un Gobierno con un programa de izquierdas es merecedora del reproche de la ciudadanía

    1.- La imposibilidad de contar con un Gobierno con un programa de izquierdas es merecedora del reproche de la ciudadanía y particularmente de la ciudadanía progresista de España, que se movilizó masivamente para impedir el ascenso al poder de unas derechas contaminadas en sus discursos por la irrupción ultra de Vox.

    Hoy es esa ciudadanía la que mira perpleja, desde la incredulidad y la frustración, la incapacidad de los líderes de las fuerzas progresistas de ponerse de acuerdo sobre una opción programática, una fórmula de Gobierno y un juego de mayorías parlamentarias para llevarla adelante.

    Hoy ante la trascendente y sensata opción que la ciudadanía española había otorgado a la política con mayúsculas, sería imposible explicar a nadie cabal que un juego de filtraciones, de disputa de espacios de gobierno a conquistar o a vetar, que las inconcreciones programáticas, o que la tentación de hacer pagar al otro el “pato” del descuerdo, nos haya llevado a esta situación.

    2.- CCOO defendió desde la misma noche electoral un acuerdo político que debía tener dos objetivos. El primero, poner en marcha una batería de medidas para afrontar la desigualdad y la precariedad laboral –y por tanto vital- que afecta a muchos millones de personas en nuestro país. Para ello era imprescindible corregir y derogar reformas efectuadas en el “periodo especial del austericidio”, que había roto algunos de los equilibrios que determinan la distribución de riqueza en nuestro país. Hablábamos de reforma laboral, de pensiones, fiscalidad y de desempleo fundamentalmente. Para ello el pacto de izquierdas era condición sine qua non.

    En segundo lugar, España debía adoptar una agenda reformista de amplio perímetro para enfrentar los cambios que en la economía y la sociedad, están mutando ya nuestra forma de vivir, producir, distribuir, aprender, etc. Una agenda reformista que no se puede hacer solo desde la izquierda, pero que si echaba a andar desde parámetros progresistas, podía ser más inclusiva, más democrática, más social.

    Y reivindicábamos el papel de CCOO, de los sindicatos, de los agentes sociales, de la sociedad civil, ante un reto que requiere de determinación regulatoria y a la vez de recomposición de las legitimidades de representación y deliberación democrática.

    3.- Estas aspiraciones siguen vigentes. Emplazamos, exigimos a los partidos en general, pero al PSOE y al Grupo Confederal de Unidas Podemos en particular, altura de miras. Testar bien lo que está en juego. Los términos de reconstrucción de un contrato social en España, en medio de la complejísima agenda reformista que aborde las transiciones de empleo, medioambientales, formativas, de protección social. Y en un endiablado contexto internacional que reconfigura las relaciones geopolíticas mundiales, con efectos en el comercio, en la propia configuración de la Unión Europea, y de la correlación de fuerzas en nuestro entorno, hoy escorado no ya a la derecha clásica, sino a nuevas expresiones antipolíticas.

    La repetición de las elecciones no es una opción. Volver a hacer votar a la ciudadanía supone mantener al país en la parálisis por demasiado tiempo, como si no tuviésemos problemas acuciantes a los que dar respuesta; supone eludir las responsabilidades que tienen las formaciones políticas desplazándolas a los ciudadanos y ciudadanas como si estas no hubieran votado cabalmente hace pocos meses y supone también abrir una nueva posibilidad para que de esta situación saquen provecho las posiciones de la derecha, dado el nivel de desencanto del electorado progresista.

    4.- CCOO recuerda que con Gobierno investido o en funciones hay cuestiones de gran trascendencia que deben abordarse en plazos tasados sobre las que va a centrar su acción reivindicativa como son: la revalorización de las pensiones para el próximo año, la fijación del nuevo Salario Mínimo Interprofesional, la mejora de los salarios a través de la negociación colectiva que no se para por muy complicada que esté la situación política, el problema de la vivienda en general y en particular de los alquileres,…

    5.- CCOO tampoco se dejará condicionar por la nefasta situación política actual en su objetivo de organizar a los trabajadores y trabajadoras para la acción colectiva y se volcará en las elecciones sindicales que se están celebrando en miles de empresas de todo el país.